De la noche a la mañana y debido a la actual pandemia por el nuevo coronavirus COVID-19, las trabajadoras sexuales se han quedado sin el mínimo de ingresos que recibían para poder pagar un cuarto o llevar un pan a su casas.
Ahora, como muchos miles de compatriotas sobreviven a duras penas de sus ollas comunes y la solidaridad.
Las pocas que aun salen a trabajar en medio de la pandemia impulsadas por la necesidad, se exponen enormemente al contagio que podría llevarlas a la muerte.
Esta semana por primera vez el Gobierno se pronuncio sobre la situación de las mas de 100 mil trabajadoras del placer de este sector afirmando que las protege, pero ellas lo desmienten y afirman que se sienten abandonadas.
Sea testigo de su realidad y como sobreviven en plena pandemia, en una crónica de colección de nuestra reportera Manuela Camacho.
