Ellos son artistas de semáforos, quienes con sus acrobacias, a base de bailes o manipulando cuchillos, entretienen a más de un conductor en nuestras calles limeñas. Para estos jóvenes esto es una forma de ganarse la vida, y aseguran que a mayor riesgo, mejor dinero reciben.
Algunos son bailarines por vocación y manejan el famoso break dance mejor que nadie. Otros ya tienen en este oficio casi una vida y, pese a que son de otro país quieren a nuestro Perú, como si fuera el suyo.
Conoce un poco más de este arte en Al Sexto Día, que muchas veces hemos confundido a los intérpretes con personas que no tienen oficio ni beneficio, sin pensar que detrás de esos contorneados movimientos, existe sueños como, los que usted quizá algún día quisiera realizar.