Un grupo de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachussets desarrolló un robot de origami, que puede desplegarse en el estómago humano, curar heridas o suministrar medicamentos.
Este dispositivo está hecho de intestino de cerdo, un microchip y un pequeño imán que puede ser ingerido fácilmente por el paciente.
Cuando llega al estómago se despliega en los jugos gástricos donde es guiado para completar sus tareas, incluso puede eliminar elementos no deseados que se encuentran en el intestino.