Una mujer californiana interpuso una demanda a una conocida marca de maquillaje tras contraer una enfermedad. La afectada interpuso la demanda porque, según dijo, había contraído un herpes labial al usar uno de los coloretes de prueba de una de sus tiendas.
La mujer asegura que nunca había padecido esta enfermedad antes de usar uno de estos tester. La realidad es que el herpes labial es una enfermedad que se contagia con cierta facilidad y sí es posible la transmisión a través de contacto por fómites, tales como objetos de aseo personal, toallas, y por supuesto cosméticos.
Este caso pone en duda que tan higiénico es usar estos maquillajes de prueba que son ofrecidos en muchas tiendas por departamento como una manera de impulsar sus ventas.