El llamado Globo Gástrico llega al estómago en una cápsula y se evacúa en las heces automáticamente pasados los cuatro meses y es que no necesita endoscopia ni para su inserción ni para su retiro, de esta manera los pacientes que sufren de obesidad no necesitan pasar por un quirófano.
La manera como actuá es que una vez en el estómago, el globo le da al paciente una sensación de saciedad que hace que coma menos.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Sapienza, en Roma, probó el Elipse Balloon en 38 pacientes obesos y concluyó que constituye "un método seguro y eficaz para perder peso", que no causó efectos adversos.