Investigadores de la Universidad Northwestern en Evaston, Estados Unidos, fabricaron ovarios artificiales, también llamados "ovarios bioprotésicos" con una impresora 3D con gelatina como tinta.
Estas estructuras impresas tridimensionales recompusieron la fertilidad en ratones. Las implantaron en hembras esterilizadas con mucho éxito.
Cabe indicar que estos nuevos ovarios permitieron el normal funcionamiento de todo el proceso reproductivo. El proceso fue exitoso en ratones hembras, que pudieron ovular, parir y amamantar crías completamente sanas