La creciente ola de extorsiones y ataques contra transportistas en Lima y el Callao ha generado reacciones en el Congreso. El legislador José Cueto propuso que los conductores del transporte público instalen láminas antibalas en sus unidades como medida de protección frente a las bandas criminales.
“Si la delincuencia sigue ganando terreno y la Policía no puede hacer frente a estas bandas organizadas, los transportistas deben tomar medidas extremas para defenderse”, sostuvo Cueto.
POLICÍAS COMO CIVILES EN UNIDADES DE TRANSPORTE
Además, sugirió que efectivos de la Policía Nacional del Perú (PNP) se integren como civiles a las unidades de transporte para actuar de forma preventiva ante casos de extorsión.
Estas declaraciones se dan en un contexto de creciente inseguridad en el sector transporte, donde los conductores no solo enfrentan amenazas constantes de mafias, sino también una respuesta estatal considerada débil por diversos sectores.