La situación de la presidenta Dina Boluarte respecto a sus cirugías estéticas se complica aún más luego de que un testigo protegido brindara nueva información ante la Fiscalía.
Según este testigo, la operación estética no era necesaria para la mandataria, lo que contradice la versión de Boluarte, quien afirmó que se sometió a la intervención por problemas de salud.
“El primer intento de cirugía se realizó en la clínica Sanna de San Borja, donde le tomaron una placa a la presidenta para evaluar si podía operarse. El médico que la atendió le señaló que no era necesario”, aseguró el testigo.
La presidenta, conociendo la versión de este especialista, no habría quedado satisfecha y habría pedido a su asistente, Patricia Muriano, que buscara otras opiniones, entre ellas la del doctor Mario Cabani.
De acuerdo con la Fiscalía, la cirugía de Boluarte se habría realizado en junio de 2023, aunque desde marzo de ese año ya estaba en la búsqueda de un médico que avalara la intervención estética que deseaba.
¿NO PAGÓ POR CIRUGÍA?
Fuentes fiscales también señalan que la presidenta no habría pagado por la operación con el doctor Mario Cabani, presuntamente a cambio de nombrar en puestos clave del Estado a personas cercanas al médico.