El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador volvió a interferir en los asuntos internos del Perú a pesar de la tensa relación que existe entre ambos países tras el asilo otorgado a la familia del golpista ex presidente Pedro Castillo.
Producto de esta actitud de López Obrador y tras el asilo político a favor de Lilia Paredes y sus dos hijos, la cancillería peruana declaró como persona no grata al embajador mexicano en Lima y le pidió que vuelva a su país.
Desde el gobierno mexicano indicaron que la embajada de este país en Lima continuará en funciones para proteger a sus compatriotas en Perú.
Sin mayor reparo, el mandatario mexicano ahora opinó sobre el adelanto de elecciones en Perú. No se trata de un solo pronunciamiento de López Obrador sobre temas internos, desde el 7 de diciembre, fecha en que Pedro Castillo intentó dar un golpe de Estado, el presidente mexicano tuvo diversos discursos refiriéndose al Perú.
En todo momento el presidente mexicano defendió al vacado mandatario Pedro Castillo exigiendo su continuidad en el cargo.
