El Gobierno del presidente Pedro Castillo continúa golpeando la inversión privada en el país. Esta vez, con la paralización de las actividades de la minera de cobre Quellaveco en Arequipa y que este martes se cumple el plazo para decidir si le revertirá el permiso para el uso de agua.
Una paralización que según Pablo Lavado, vicedecano de la Facultad de Economía de la Universidad Pacífico, generaría una pérdida de 200 millones de dólares mensuales, dinero con el que la comunidad de Islay podría crecer económicamente.
La decisión del Gobierno se da luego de que la ministra de Agricultura, Jenny Ocampo, se reuniera con legisladores de Islay para tratar el permiso para la minera Quellaveco para el uso del agua de la zona. Sin embargo, los grandes ausentes en esta reunión fueron los representantes de la minera de cobre quienes no habrían sido invitados.
El especialista detalla que la presencia de la Minera Quellaveco podría incrementar el 30% de producción de cobre en el país y convertir al Perú en uno de los principales productores generando una mejor calidad de vida para los ciudadanos.
Además, de negarse el permiso a esta minera el PBI caería de 3 % a 2.7 % que afectaría aún más la economía del país y el bolsillo de las familias peruanas, pese a esta incertidumbre el ministro de Economía Kurt Burneo minimizó esta situación.
