El fin de semana, de manera sorpresiva, el presidente Pedro Castillo Terrones, su esposa, sus dos hijos y su cuñada Yenifer Paredes, se trasladaron en dos helicópteros del Ejército peruano hasta Cajamarca.
Por algunas horas el jefe de Estado permaneció en su localidad para informarse sobre el estado de salud de sus padres. Fue reguardado en todo momento por efectivos policiales.
En el centro poblado de Puña, Castillo Terrones saludo a sus vecinos. La visita a su tierra natal fue corta, pues a las 3:00p.m. del último lunes el mandatario, retornó a Lima junto a su padre Ireño Castillo quien recibirá atención médica en la capital.