Tras meses de ser requerido por la justicia, el congresista Benicio Ríos se puso a disposición del Congreso de la República. El parlamentario fue condenado a siete años de cárcel por el delito de colusión agravada contra el Estado peruano.
El legislador indicó que ha interpuesto una casación ante la Corte Suprema para revertir la sentencia. Ríos explicó que su condena responde a un interés político por 'liquidarlo'.
Él también detalló que la sentencia se dio por "haber comprado un terreno pensando en que Machu Picchu tiene que mostrarse al mundo limpio (...) teníamos un problema de no tener un terreno adecuado para depositar residuos sólidos. Declaramos en emergencia y se compra un terreno con todos los procesos administraticos (...) 98 mil metros cuadrados con 406 mil dólares", señaló.
Ante las preguntas de por qué se habría mantenido en la clandestinidad, respondió: "hemos estado detrás del proceso de casación, no ha sido tan fácil para mí, pero siempre he estado en coordinación con los asesores de mi despacho".
Benicio Ríos argumentó que no acudió mientras la casación no se encontraba completa, pero ahora que ingresó acudió al congreso para 'ponerse a derecho'. El congresista anunció que participará en las comisiones que le corresponden.