En el 2006, Jorge Ávila acudió hasta la Fiscalía de Tocache donde denunció que Ollanta Humala era el capitán ‘Carlos’ y lo sindicó como el presunto asesino de su hermana Natividad y su cuñado Benigno Sullca en la base militar de Madre Mía, localidad ubicada en la región San Martín en la que en medio de la guerra anti subversiva habría ordenado y ejecutado las desapariciones.
Ávila aseguró ante las autoridades que Humala había ordenado un ataque contra él y sus familiares tras acusarlos de ser miembros de Sendero Luminoso. Aseguró haber sido secuestrado y torturado pero logró escapar. Sin embargo, su hermana, Natividad Ávila rivera y su cuñado, Benigno Sulca Castro se encontraban desaparecidos.
Ya para el 2006, el Poder Judicial le abrió un proceso por os delitos de homicidio calificado, desaparición forzada y lesiones graves pero no se le realizó ningún juicio oral. En el 2009, la Sala Penal Nacional archivó el caso ya que los testigos, incluso Ávila desmintió lo que habían dicho inicialmente. Sin embargo, en enero de 2011 fue difundido un video donde se revelaba la compra de testigos.
El caso Madre Mía ha sido reabierto debido a que varios testigos han decidido romper su silencio. Además fueron revelados audios que confirmarían la compra de testigos por parte del suboficial EP Amílcar Gómez Amasifuén, hombre de confianza del ex jefe de Estado. Lo cierto es que el caso aún sigue en investigación y solo las autoridades determinarán su responsabilidad.