La revelación de que la empresa brasileña Odebrecht habría desembolsado 29 millones dólares para sobornar a funcionarios de los gobiernos de Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala ha generado una serie de reacciones en el Congreso de la República.
Mauricio Mulder fue uno de los que salió al frente para expresar que estos presuntos actos de corrupción solo recaerían sobre empleados públicos de menor y mediano rango, más no sobre el expresidente aprista y sus ministros.
Durante el gobierno de Alejandro Toledo, donde se inició la megaobra de la Carretera Interoceánica, Pedro Pablo Kuczynski se desempeñó como ministro de Estado. Primero en la cartera de Economía y luego como jefe del Gabinete. Por esta razón, el mandatario fue incluido como testigo en la investigación que realiza el Ministerio Público sobre el caso Lava Jato.
Ollanta Humala también está envuelto en esta investigación. El tramo II de la Línea I del Metro de Lima, también fue incluido dentro de las investigaciones por presunto pagos de coimas de empresas brasileñas a funcionarios peruanos. El Gasoducto del Sur también sería otra obra cuestionada. A pesar de estas imputaciones, el ex parlamentario nacionalista Santiago Gastañudui se mostró tranquilo ante las pesquisas.
En el Congreso de la República, la comisión Lava Jato fue reactivada para investigar este caso. Pese a ello, el grupo de trabajo hasta el momento no se reúne para iniciar sus labores. Marco Arana, tras los pronunciamientos de Mauricio Mulder tuvo fuertes críticas hacia el parlamentario aprista.
