El internacionalista Juan Velit se refirió sobre la destitución de Dilma Rousseff, quien ya no es más presidenta de Brasil. Para el especialista, se trata de un acto de conspiración política, que no puede ser calificada como un golpe de estado porque la medida se sujeta a las leyes de la constitución brasileña.
Es cierto que Brasil no pasaba por su mejor momento. Recesión e inflación fueron los componentes claves para la salida política de Rousseff, sumado a los errores políticos durante su gestión.
Sin embargo, pese a sacarla del máximo cargo gubernamental, los senadores decidieron no inhabilitar a Dilma Rousseff para ejercer funciones públicas. Tras su destitución, los gobiernos de Ecuador, Bolivia y Venezuela se manifestaron.
Incluso el ex presidente Ollanta Humala, a través de un comunicado del partido nacionalista, expresó su solidaridad con Dilma Rousseff y cuestionó a los senadores que votaron a favor de su salida.
Juan Velit considera que tras el cambio de gobierno en Brasil y Perú, nuestro país deberá tomar las riendas para dinamizar las relaciones con el país vecino.
