Una ciudad en la región de Puno ha tomado la decisión de cambiar su nombre que tenía, al igual que la excandidata presidencial Keiko Fujimori. Según la ciudadana llamada anteriormente, Keiko Lili, su decisión se debió a ser constantemente objeto de ataques psicológicos.
La ciudadana presentó una solicitud para cambiar su nombre ante el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (RENIEC) en 2019, argumentando que llevar el nombre "Keiko" le causaba daño psicológico. En sus declaraciones ante RENIEC, explicó que, al revelar su nombre, recibía insultos y comentarios ofensivos.
Después de un proceso legal, la Sala Superior de Juliaca accedió en segunda instancia a permitir el cambio de nombre de la ciudadana. La decisión se basó en su afirmación de sentirse perjudicada psicológicamente desde temprana edad.
Es importante señalar que RENIEC, antes de aceptar el cambio de nombre por decisión judicial, argumentó que este procedimiento solo es aceptable cuando un nombre específico hace referencia a algo éticamente cuestionable.