Un impresionante repunte empieza a registrar la economía peruana alcanzando un crecimiento en el mes de abril de nada menos que 58.49 %, la cifra mas alta desde que inició la pandemia en marzo del 2020.
En la etapa pre pandemia, en enero y febrero del año pasado el crecimiento no era de los mejores de los últimos años, pero fue positivo, mayor al 3% pero de allí en marzo vino la hecatombe de la emergencia sanitaria, y nuestra economía cayó estrepitosamente a -16.76 %.
El mes de abril fue el peor... el crecimiento bajo hasta -39.09% y al mes siguiente, en mayo, el indice continuó en -32.59 %.
Los meses siguientes hasta noviembre fueron en la misma, nuestro país cerró el 2020 con una mínima cifra positiva de 0.58 % pero automáticamente volvimos a caer en enero de este año a -1,02 % y en febrero a -3,78% para luego subir en marzo hasta el 18.21% y llegar a abril a un 58.49 %.
El economista Juan José Marthans atribuye este crecimiento a dos factores, el primero la política fiscal y económica aplicada desde el Gobierno.
"Perú ha sido una de las economías más esfuerzo ha hecho en materia fiscal para salir del proceso recesivo asociado al coronavirus. Perú ha comprometido gastos en 20 % del PBI, como casi nadie en América Latina", expresó.
El segundo factor es el buen comportamiento de sectores como minería e hidrocarburos, manufactura, electricidad, construcción, ocasionados por la expansión de la economía china y estadounidense.
Juan José Marthan estima que el Perú puede alcanzar el 10 % de crecimiento anual para finales de año, uno de los más altos de Latinoamérica y el mundo.
No obstante, para los meses de mayo y junio el ritmo de expansión disminuiría levemente por la incertidumbre política por los resultados de las elecciones. Por ello, Juan José Marthans aconseja que quien sea elegido como el próximo presidente deberá exponer de manera clara cuál será su política en materia económica para generar confianza en la comunidad internacional.
Otro de los aspectos importantes sera continuar la política de inversión en infraestructura que atraerá inversión extranjera que dejará grandes impuestos y que, adicionalmente, generará millones de puestos de trabajo.
