Conmoción entre los pobladores del asentamiento humano América del Sur, del distrito de Nuevo Chimbote en Áncash, por el asesinato de la misionera italiana, Nadia De Munari, de 50 años, mientras dormía en una Casa Refugio de comunidad cristiana.
El hecho ocurrió el pasado 24 de abril, la misionera fue encontrada por sus compañeros con cortes y fracturas por todo el cuerpo, fue internada de emergencia falleciendo al día siguiente. Inicialmente se pensó que se trataba de un robo.
Pero luego de las primeras pesquisas, esa hipótesis quedó descartada pues no estaba forzada la puerta de la habitación y la misionera no guardaba dinero ni cosas de valor, la policía sospecha ahora que el asesino sería una persona cercana a la víctima.
“Ella alimentaba gratuitamente a los niños y madres de escasos recursos, realizaba permanente labor social en favor de los más necesitados de la zona, por ello no se entiende el salvaje ataque a una persona tan buena” indicaron los moradores entre lágrimas.