En Trujillo, ciudadanos asistieron a un matrimonio, pese a que las reuniones sociales están prohibidas, los invitados no contaban con protectores faciales, mascarillas y no respetaban el distanciamiento social.
A pesar que los agentes les indicaban que los acompañen a la comisaria, los asistentes continuaron en sus asientos por largo rato, incumpliendo el pedido de los efectivos. Al final de todos modos los más de 30 invitados terminaron detenidos.
Por otro lado, en Piura, la policía intervino cerca de 20 personas, entre ellos varios menores de edad, cuando realizaban una fiesta en el asentamiento humano el obrero, en la provincia de Sullana.
Todos los intervenidos fueron trasladados a la comisaria, también se decomisaron varias cajas de cerveza y los menores de edad fueron entregados a sus padres previa llamada de atención por faltar las disposiciones del gobierno.
Sin embargo, en Cajamarca, efectivos del serenazgo en un trabajo articulado con la policía intervinieron a 18 jóvenes que se encontraban reunidos con aparentes intenciones de realizar una fiesta.
Cabe indicar que muchos de estos jóvenes ni siquiera portaban mascarillas y entre los menores de edad se logró identificar a uno de tan solo 13 años por lo cual se procedió a trasladarlos hasta la Primera Comisaría para el procedimiento de ley.
