Un mototaxista venezolano castigó a un compatriota suyo que había tomado su servicio en Huaral, debido a que este lo amedrentó en el trayecto con una réplica de pistola para intentar robarle su celular.
Ante esta situación el extranjero solicitó ayuda a un policía de tránsito que se encontraba cerca, quien atraparía a este delincuente.
Posteriormente, tanto víctima como victimario fueron a la comisaría, donde este último le recriminó a su compatriota por su mal accionar en nuestro país.
Sin embargo, su indignación no solo se presentó verbalmente, sino también físicamente contra el sujeto al interior de la delegación policial.