Las cifras son claras. En lo que va del año, en el hospital regional de Lambayeque han muerto 30 recién nacidos por falta de incubadoras, pero además este nosocomio presenta gran escasez en equipos. A pesar de las carencias, la Contraloría General de la República detectó que en la anterior gestión regional de Lambayeque, se habría desviado un millón de soles del presupuesto para salud a tarjetas de canastas navideñas.
En Arequipa, ya son 63 los bebés prematuros que fallecieron este año. Aunque el hospital Honorio Delgado cuenta con cuatro incubadoras, debería tener al menos 12.
En tanto, en el hospital regional Materno Infantil de Huancayo, se han reportado la muerte de 38 bebés prematuros durante el 2019. La carencia de equipos en este nosocomio es tal que los recién nacidos deben compartir incubadoras. En Trujillo son 37 los neonatos fallecidos por falta de equipamiento, personal e infraestructura.
Mientras las autoridades regionales señalan una falta de presupuesto, la ministra Zulema Tomás responsabiliza a los gobiernos regionales, pues el gobierno transfiere a las regiones el presupuesto para el sector salud, de modo que son los gobiernos regionales los responsables en ejecutarlo.
“Por primera vez en el Perú, este año se ha transferido el presupuesto de las regiones, y cuando hablo de presupuesto de las regiones, efectivamente, es para manejar el pago de recursos humanos, para equipamiento, para realizar los mantenimientos de equipos”, indicó la Ministra de Salud.
Según Tomás, a pesar de las trágicas cifras la mortalidad infantil se ha reducido en 18% en los últimos dos años.
