El principal problema que afecta a la Líneas de Nazca es la falta de presupuesto para su preservación. El ministerio de Cultura recibe menos del 1% del presupuesto nacional, y el plan de gestión de las Líneas de Nazca es de, aproximadamente, 100 mil soles anuales.
Como alternativa a los escasos recursos con que cuenta el ministerio de Cultura, hay quienes proponen permitir inversiones privadas en la preservación de los bienes culturales, tal como lo dijo el exgobernador regional de Ica, Fernando Cilloniz.
Diana Álvarez Calderón, exministra de Cultura, promulgó el decreto legislativo 1198, que permitía a los privados a invertir en sitios arqueológicos, sin que estos dejen de ser propiedad del Estado, pero la norma fue derogada por el Congreso.
Aunque este modelo de inversión privada ha sido éxitos en casos como la Huaca Pucllana, y de las Huacas del Sol y de la Luna, cabe preguntarse cuáles son las dificultades para aplicarlo a un extenso territorio como el de las Líneas y Geoglifos de Nazca.