El clamor popular se ha hecho sentir en las calles de Barranca. Esto debido a la trágica muerte de una niña de tan solo 10 años quien fue secuestrada, violada y estrangulada.
En horas de la tarde, un mar de gente se hizo presente en lo alto del cerro del cementerio de Puerto Supe para despedir a la pequeña Kelly, quien se ha convertido en símbolo de lucha para todo un pueblo que exige justicia.
Antes de ser enterrado, el féretro con el cuerpo de la niña fue paseado por las principales calles de Barranca, este recorrido incluyó el colegio donde la menor cursaba el cuarto grado de primaria.
Mientras la población pedía a gritos la pena máxima para Julio César Arquinio Giraldo (21), el asesino confeso de la pequeña niña, éste venía dando detalles a la Policía de su horrendo crimen.
Arquinio Giraldo es un rankeado delincuente con antecedentes por extorsión, tocamientos indebidos y acoso sexual a menores de edad.
La Fiscalía ya ha solicitado 9 meses de prisión preventiva para Arquinio Giraldo para que se realicen las diligencias correspondientes.