El crimen ocurrió durante la madurada en la parte alta del barrio Chontapaccha en la ciudad de Cajamarca. Fueron los ronderos urbanos quienes encontraron el cadáver de Ronaldo Flores Chávez, sobre un charco de sangre y de inmediato dieron aviso a las autoridades. La víctima había sido asesinado a puñaladas al resistirse al robo de su equipo celular cuando se dirigía a su casa.
A la morgue central de Cajamarca, llegaron sus familiares y la madre del occiso protagonizó dolorosas escenas al conocer que su hijo había sido asesinado cruelmente.
Los deudos indicaron que Ronaldo, trabajaba como cobrador de combi para pagarse los estudios y ayudar a su familia. Ellos pidieron que se haga justicia y se capture a los responsables de este crimen.