La celebración religiosa a San Martín de Porres, terminó en un gigantesco incendio que redujo a cenizas la sede la comisaría de la Rinconada en la ciudad de Juliaca, donde funcionan las unidades de investigación policial (Departamento de Investigación Criminal, Departamento Antidrogas, Seguridad del Estado y la Oficina de Criminalística).
El fuego se originó luego que los miembros de la policía detonaran artefactos pirotécnicos en los exteriores de la sede. Al menos 10 vehículos incautados que se encontraban en proceso de investigación quedaron inservibles producto del incendio, que también afectó una vivienda aledaña y a un centro escolar.