Un joven de 29 años con síndrome de down ha permanecido atado a un poste por más de 20 años en Tarapoto. Según denunciaron sus vecinos, Felipe se quedaba amarrado de pies y manos mientras su madre salía a trabajar.
A pesar de las condiciones infrahumanas en las que ha vivido gran parte de su vida, el joven no ha perdido la alegría y así lo demostró al ver a varias personas dentro de su hogar.
Su madre, Nicolasa Góngora, aseguró que su hijo sufrió de meningitis a los cuatro años. Su precaria condición económica no le ha permitido trasladar a Felipe a un centro de salud especializado para su tratamiento.