Los transportistas que recorren la avenida Venezuela, una de las principales arterias que conecta Callao con Lima, denunciaron ser víctimas de extorsión diaria por parte de delincuentes armados.
Según relataron, los conductores deben pagar hasta 10 soles al día para evitar represalias mientras trasladan pasajeros a lo largo de la concurrida vía.
Amenazas con armas y chats de control
Los choferes aseguran que los extorsionadores se presentan con rifles en mano para intimidarlos, obligándolos a cumplir con los pagos de manera sistemática.
Como si fuera poco, los delincuentes han creado un chat de WhatsApp donde exigen a los transportistas enviar fotografías de los comprobantes de pago, reforzando el control sobre las víctimas.
Autoridades ausentes ante el crimen organizado
La situación ocurre a plena luz del día y bajo la mirada de las autoridades, lo que incrementa la sensación de desprotección entre los conductores.
Pese a las reiteradas denuncias, no existen operativos visibles que frenen la violencia, mientras los transportistas continúan trabajando bajo amenazas de muerte y en permanente temor.