ADRA Perú y Panamericana lograron recaudar más de 43 mil soles para ollas comunes

En medio de la persistente necesidad alimentaria que enfrentan numerosas comunidades en el país, ADRA Perú y Panamericana Televisión unieron fuerzas en la campaña Alimentando Sueños, una iniciativa que logró movilizar a empresas, figuras públicas y ciudadanos comprometidos con una sola meta: apoyar a las ollas comunes, espacios esenciales para la subsistencia de cientos de familias vulnerables.

Una alianza solidaria que alimenta esperanzas

El resultado de esta colaboración solidaria fue contundente. La campaña consiguió recaudar más de 43 mil soles y distribuir 64 toneladas de alimentos a 23 comedores populares, contribuyendo así con insumos valorizados en más de 362 mil soles. Este apoyo ha significado un alivio concreto y oportuno para cientos de personas que, gracias a esta red de apoyo, pudieron acceder a un plato de comida caliente.

Pero Alimentando Sueños va más allá de la asistencia alimentaria. Como parte de su enfoque integral, la iniciativa también promovió la capacitación de 55 integrantes de la olla común Flores de Amancaes, ubicada en Lima. Este grupo de mujeres y hombres recibió formación para desarrollar pequeños emprendimientos, con la visión de generar ingresos sostenibles para sus familias.

La campaña es un testimonio de que la solidaridad organizada puede generar cambios reales. Si bien los desafíos persisten, los logros alcanzados reafirman la importancia de continuar trabajando juntos. Mientras el hambre sea una realidad, el compromiso con estas comunidades debe mantenerse firme y constante.

La campaña Alimentando Sueños de ADRA que apoyó Panamericana logró el objetivo y este fue el monto recaudado

• S/. 43,000 soles Ingresados a nuestras cuentas.
• S/. 362,000 soles en alimentos valorizados por 64 toneladas.

La participación de periodistas y figuras de entretenimiento de Panamericana fueron fundamentales para el éxito de esta importante campaña. En este momento, equipos de proyectos de ADRA está teniendo reuniones con empresas, para canalizar donaciones de 102 toneladas de frutas para las poblaciones vulnerables de Tacna y Arequipa y, muy probablemente, para Cusco y Abancay. El dinero y alimentos recaudados no sólo servirán para mejorar la alimentación de los peruanos más necesitados, sino que abren la posibilidad de iniciar emprendimientos a estas comunidades para que sean sostenibles en el tiempo.