Días atrás, un aniego de aguas servidas provocado por la ruptura de una tubería durante obras municipales de renovación de pistas, ha convertido su entorno en una zona de riesgo e insalubridad en Breña.
En este distrito, los trabajos de remodelación del jirón Carhuaz avanzan con algunos problemas. Como ya se ha hecho costumbre en nuestra Lima, la ejecución de obras públicas no suele medir el impacto social en el vecino.
No solo los residentes de Breña han sido los perjudicados, sino que también los negocios han perdido clientes, ya que, muchos de ellos que se trasladan en un vehículo no tienen un sitio donde dejar su unidad.
OTRO PUNTO DE LA CAPITAL CON RETRASO EN LAS OBRAS
En Barranco la remodelación de la calle Vigil también genera preocupación, sobre todo porque no existe señalización de desvío en las calles aledañas, lo cual genera que los carros se enteren de las obras justo en el momento en el que ya no pueden avanzar más.
