Tras el ataque a balazos contra un bus del Corredor Rojo ocurrido la mañana del último viernes, agentes de la Policía Nacional vienen resguardando los paraderos de estas unidades, especialmente en la zona donde se registró el atentado, en el distrito limeño de Ate.
Como se recuerda, el bus fue atacado alrededor de las 6:30 a. m., cuando iniciaba su recorrido con numerosos pasajeros a bordo. Delincuentes a bordo de una motocicleta interceptaron el vehículo en las inmediaciones del Estadio Monumental y, tras dejar una amenaza extorsiva, dispararon contra el bus antes de huir.
Desde entonces, efectivos policiales abordan diversas unidades del Corredor Rojo para acompañar a los pasajeros y así evitar nuevos ataques por parte de extorsionadores, quienes en los últimos meses han tomado como blanco al transporte público, sembrando terror entre pasajeros y choferes.
USUARIOS VIAJAN CON MIEDO
Ante esta situación, los usuarios piden a las autoridades mayor control en el transporte público, así como una vigilancia permanente en paraderos y buses. Además, aseguran que cada día salen de sus hogares con temor a ser víctimas de ataques armados por parte de delincuentes.