Motociclistas siguen circulando en dúo pese a norma y sicariato no se detiene

Una semana después de que entrara en vigencia el Decreto Supremo que prohíbe la circulación de motocicletas con dos personas, los crímenes bajo esta modalidad no se han detenido. El reciente asesinato de un joven jalador en la avenida México y de un mototaxista en San Juan de Lurigancho evidencian que los sicarios continúan operando sin temor alguno. Mientras tanto, los ciudadanos que usan sus motos de manera formal se sienten injustamente afectados por una medida que, al parecer, no está siendo aplicada con rigor.

Falta de operativos y cumplimiento de la norma

Durante un recorrido por diversas avenidas de la capital, se pudo observar decenas de motocicletas transitando con dos personas a bordo, desafiando abiertamente lo estipulado en el Decreto Supremo. A diferencia del 17 de abril, cuando se desplegaron operativos policiales para hacer cumplir la norma, ahora no se evidenció presencia de fiscalización ni controles en las calles. Para muchos, esta es una muestra clara de cómo una ley puede convertirse rápidamente en letra muerta si no se respalda con acciones firmes.

Ricardo Valdés, exviceministro del Interior, calificó la medida como arbitraria, al señalar que afecta a motociclistas formales que simplemente trasladan a sus familiares. Según explicó, los sicarios siempre encontrarán formas de evadir las reglas, por lo que la solución no estaría en restricciones generalizadas sino en inteligencia y prevención eficaz.

El ministro de Transportes, Raúl Pérez Reyes, anunció la implementación del Decreto como una respuesta a la ola de violencia perpetrada por sicarios en motocicleta. Sin embargo, con crímenes recientes cometidos bajo la misma modalidad y sin vigilancia en las calles, la ciudadanía se pregunta si realmente hay voluntad política para erradicar este problema o si todo se quedará en el papel.