El paro de transportistas convocado por diversos gremios de Lima y Callao, en protesta por el aumento de extorsiones y asesinatos a empresas de transporte y choferes, ha generado caos entre los usuarios, quienes se vieron imposibilitados de llegar a sus centros de estudio y trabajo.
Aunque la mayoría de los transportistas formales acataron el paro desde las primeras horas de la madrugada, el transporte informal se hizo presente en las calles para cubrir la demanda de los usuarios. Sin embargo, las personas denunciaron que los pasajes se triplicaron debido a la escasez de transporte disponible.
PASAJES POR LAS NUBES
Uno de los puntos de concentración del transporte informal fue el óvalo de Santa Anita, donde los usuarios que normalmente pagaban un sol en colectivo hasta esa zona tuvieron que desembolsar hasta cinco soles. Posteriormente, de ese lugar, tomar otro tipo de transporte a su destino.
Otros pasajeros, especialmente aquellos que viajaban desde la zona de Chaclacayo, también se vieron gravemente afectados. Los viajeros, que solían pagar tres soles, ahora tuvieron que abonar hasta ocho soles para llegar hasta el óvalo de Santa Anita, punto donde debían hacer un trasbordo para continuar hacia sus centros de trabajo.