El cierre de dos cuadras de la avenida Petit Thouars, en Lince, ha generado no solo gran congestión vehicular, sino también serios inconvenientes para los vecinos y comerciantes de la zona. La destrucción de las veredas ha complicado el tránsito peatonal, dejando a muchas personas sin posibilidad de salir de sus hogares. "Tengo un paciente en silla de ruedas y no lo puedo sacar", expresó con desesperación una vecina, pidiendo que se agilicen los trabajos.
Los comerciantes también han alzado su voz de protesta ante las pérdidas económicas que enfrentan debido a las obras. "Aquí la mayoría alquilamos y el pago es fuerte. Para evitar afectar tanto los negocios, deberían trabajar de noche o los fines de semana", señaló uno de los afectados. Además, cuestionaron la planificación del proyecto, ya que algunas veredas habían sido construidas hace apenas medio año y ahora están siendo destruidas nuevamente.
Mientras tanto, los peatones se ven obligados a transitar por la vía, esquivando trozos de concreto esparcidos en las cuadras 17 y 18. “Todas las tiendas están llenas de polvo, nadie va a venir a comprar, esto nos perjudica muchísimo”, expresó otro comerciante preocupado por la falta de clientes y la reducción de ingresos.
ESPERAN ACELERAR TRABAJOS
Las obras están a cargo de la Empresa Municipal de Apoyo a Proyectos Estratégicos (EMAPE), y hasta el momento no se ha dado un cronograma claro sobre su finalización. Los vecinos y comerciantes esperan que se aceleren los trabajos y se implementen medidas para reducir el impacto en su vida diaria.
