A las 10 de la noche, en el paradero conocido como El Pozo, en San Martín de Porres, un sicario ejecutó a Mario Daniel Sernaqué Regalado, conductor de una cúster de la empresa NorLima, que cubre la ruta Lima Norte - Cercado de Lima. El asesinato, grabado por el propio criminal, muestra cómo la víctima fue baleada por la espalda, en un acto que se interpreta como una advertencia a otros transportistas que se niegan a pagar cupos.
Este es el segundo conductor de la empresa NorLima asesinado en menos de un mes. Según Ricardo Sernaqué, hermano de la víctima, Mario fue atacado tras dejar a su último pasajero y recibió cinco disparos. Además, los cortes en el rostro del conductor sugieren que los criminales buscaban dejar un mensaje violento y simbólico.
En las imágenes del vehículo se encontraron dos stickers que, según Ricardo, podrían ser marcas de diferentes bandas criminales que estarían luchando por el control de las extorsiones. “Si los dueños de los vehículos están siendo amenazados, deberían prohibir que las unidades salgan, porque mi hermano solo era un conductor”, expresó entre lágrimas.
TEMOR ENTRE TRANSPORTISTAS
El asesinato ha desatado el temor entre los transportistas de NorLima. Muchos siguen trabajando pese al miedo, ya que no tienen otra forma de sustento para sus familias. “Estoy asustado, cualquier moto que pase me pone en alerta, pero tengo que salir por mis hijos”, confesó un conductor. Mientras tanto, la inseguridad y las extorsiones continúan sumiendo a los transportistas en un estado de paranoia y desesperación.
