La costa del norte del Perú enfrenta una grave crisis tras los recientes oleajes anómalos y un derrame de petróleo en Piura. En Máncora, el emblemático malecón turístico fue destruido, dejando cuantiosas pérdidas materiales.
Además, cinco embarcaciones se perdieron, afectando a 25 pescadores, quienes han quedado sin herramientas de trabajo. El jefe de Defensa Civil, William Chunga, estima las pérdidas en aproximadamente 735 mil soles, incluyendo viviendas y negocios destruidos.
TUMBES
En Tumbes, la situación de los pescadores no es diferente. Las deudas por embarcaciones dañadas y la pérdida de materiales mantienen a las comunidades en incertidumbre. Jaime Yacila, alcalde de Contralmirante Villar, canceló las celebraciones de fin de año como medida preventiva.
A esto se suma el desastre ecológico en Lobitos, Piura, donde un derrame de petróleo de la Refinería Talara, operada por Petroperú, contaminó más de 10 mil metros cuadrados de mar, intensificando la preocupación por la sostenibilidad de la zona.
