El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, inauguró un nuevo espacio comercial en “La Huerta Encontrada”, ubicada en la cuadra 7 del jirón Amazonas, en Barrios Altos, con la intención de trasladar a los vendedores ambulantes de Mesa Redonda. Sin embargo, el evento estuvo marcado por el rechazo de los comerciantes, quienes no acudieron a la inauguración, argumentando que la zona es peligrosa y de difícil acceso. A pesar de los esfuerzos por parte de la Municipalidad de Lima para fomentar la formalización del comercio, los ambulantes continúan dudando sobre los beneficios de este traslado.
El nuevo espacio, que ya ha sido utilizado en ocasiones anteriores para intentar instalar una feria comercial, sigue enfrentando desafíos relacionados con su ubicación. “La Huerta Encontrada”, según los propios comerciantes, es una zona de alta peligrosidad, lo que ha desmotivado a los vendedores de trasladarse allí. Durante la inauguración, solo acudieron algunos representantes de asociaciones de comerciantes de otros distritos, pero no los esperados vendedores de Mesa Redonda. La falta de seguridad y la lejanía del lugar fueron los principales motivos de su ausencia.
En el evento, se repartieron alimentos y bebidas, pero varios asistentes reportaron que la comida estaba en mal estado, lo que generó malestar entre los presentes. La Municipalidad de Lima aclaró que no fue responsable de la distribución ni de la preparación de la comida, señalando que dicha actividad fue una iniciativa de los propios comerciantes. Mientras tanto, los ambulantes de Mesa Redonda expresaron su descontento, afirmando que no recibirán ningún beneficio al mudarse a “La Huerta Encontrada”, ya que consideran que el lugar no les brindará la oportunidad de generar ventas de manera segura.
AMBULANTES SE PRONUNCIAN
Este no es el primer intento de López Aliaga para que los comerciantes se trasladen a esta zona. El año pasado, varios ambulantes que acudieron a “La Huerta Encontrada” decidieron retirarse, citando las mismas preocupaciones de inseguridad y falta de accesibilidad. Los comerciantes insisten en que están dispuestos a ser formalizados, pero piden ser ubicados en una zona más accesible y segura para ellos y sus clientes.