Un violento ataque en una combi dejó cinco personas muertas en el Callao, entre ellas el exagente de la Policía Nacional del Perú (PNP), Luis César Felipe Vidal.
El autor del crimen, que se hizo pasar por un pasajero, tenía como objetivo al conductor, quien supuestamente se había negado a pagar extorsiones tras recibir amenazas. La familia de Felipe Vidal se pronunció tras el suceso, desmintiendo la versión inicial que afirmaba que él había intentado defenderse con un arma y que pertenecería a una banda criminal conocida como "Los Vílchez".
Marita Felipe Ramírez, hija del exagente, explicó que su padre se encontraba regresando de un velorio y que, después de que un taxi se negara a llevarlo a su casa, optó por abordar la combi fatídica.
"Desde ayer no puedo dejar de preguntarme qué ocurrió. Mi papá había esperado un taxi, pero no quiso llevarlo a su destino. Cuando llegamos a casa, nos avisaron que lo habían baleado y aún estamos en shock", comentó Marita.
NO ESTABA ARMADO
Los familiares también aclararon que Luis César Felipe Vidal no estaba armado en el momento del ataque, ya que había empeñado su arma de reglamento hace tiempo. "Él había dejado de portar armamento desde hace cinco años, tras su retiro. Trabajaba cuidando un mercado y no tenía armas en su poder", añadieron sus seres queridos.