Un policía, identificado como Luis Carbajal, resultó gravemente herido luego de que fuera disparado por barristas en Chaclacayo. El agente terminó con una grave herida en una de las piernas, pero su situación es complicada debido al daño severo que le causó.
Según las placas médicas, el proyectil prácticamente le destrozó el hueso y hasta ahora los médicos no lo pueden operar debido a la inflamación en la zona afectada. Según el padre del efectivo, se deberá esperar que baje la hinchazón para la intervención.
Pero este no es el único obstáculo que atraviesa la familia de Luis Carbajal. Resulta que la farmacia del Hospital de la Policía Nacional no cuenta con toda la medicación necesaria para tratar la lesión y la tienen que adquirir afuera, en farmacias particulares.
EXIGEN AYUDA A LAS AUTORIDADES
Según señala su esposa, Betssy de la Cruz, esta pesadilla la viven desde el sábado. Ellos esperan que el Ministerio del Interior y las autoridades del Hospital de la Policía los apoyen para la rápida recuperación del agente, quien permanece postrado en una cama.
