El asesinato de Brian Carlos Augusto Ramírez Cabello, un fiscalizador de la Municipalidad del Callao, ha puesto en el ojo de la tormenta a la gestión del alcalde Pedro Spadaro. Ramírez Cabello, quien contaba con antecedentes penales por homicidio, lesión dolosa y atropello, fue asesinado en plena vía pública.
Los cuatro presuntos autores del asesinato, que fueron detenidos a pocas cuadras del lugar de los hechos, también portaban chalecos de la municipalidad. Tras estos hechos, la municipalidad envió un oficio al jefe de la División Policial Callao, el general PNP Arturo Prado, para que se investiguen los antecedentes de todos los trabajadores ediles.
Además, la municipalidad del Callao retiró de su cargo al subgerente de Fiscalización, Santiago Diego Segura Gonzáles, a quien han señalado como el encargado de aplicar los filtros al personal que contrata la comuna.
En tanto, la regidora Norma Juárez ha revelado que la municipalidad no realiza un filtro adecuado para la contratación de fiscalizadores, denunciando que parte de los trabajadores son contratados como servicios de terceros.
MAFIAS DE COBRO DE CUPOS
El coronel de la Policía Nacional, Víctor Revoredo Farfán, jefe de la División de Investigación de Homicidios, indicó que detrás de este crimen se maneja la hipótesis que involucra a mafias de cobro de cupos.
