En el distrito de Lince, el miedo se ha apoderado de los vecinos y comerciantes tras dos explosiones ocurridas con solo una semana de diferencia. La primera de ellas ocurrió la noche del viernes 22 de septiembre, en los exteriores de la discoteca Cocos en la Avenida Arequipa.
El segundo explosivo estalló en la puerta de un hostal ubicado en la avenida Petit Thouars el sábado 30, dejando tres personas heridas. Estos hechos alarmantes han llevado a la alcaldesa del distrito, Malca Schnaiderman, a pedir que se declare en estado de emergencia su jurisdicción.
Para el ex jefe de la Dirección Contra el Terrorismo (DIRCOTE), José Baella, advierte que declarar en emergencia solo una parte de la capital podría provocar que la criminalidad se desplace hacia otros distritos, agudizando los conflictos entre bandas criminales.
DÉFICIT DE POLICÍAN EN EL PAÍS
Los comerciantes locales y vecinos de la zona de Risso, lugar que se caracteriza por su actividad nocturna debido a la prostitución, se han mostrado a favor del pedido de estado de emergencia. A pesar del apoyo popular a esta medida, el gobierno ha señalado que en Perú hay un déficit de 40 mil agentes de la Policía Nacional.
