Fue protagonista de un terrible accidente mientras cumplía su deber causando preocupación en todos sus colegas, pero afortunadamente su recuperación es favorable.El suboficial de la Policía Nacional, Jhoao Jolkeda Loyola, a quien le cayó un enorme congelador encima cuando realiza una labor de rescate de un cadáver en el río Rímac, narra los momentos de terror que le tocó vivir mientras realizada un trabajo de alto riesgo.
“Lo último que recuerdo es que estaban cayendo los escombros y que por la desesperación tiraron la cuerda y yo me aseguré en la cuerda y el arnés y di dos pasos hacia arriba, comencé a ascender y de ahí ya no recuerdo que me cayó la congeladora y recobro la conciencia cuando estoy arriba, cuando mis compañeros me tienen arriba, ahí recobro la conciencia”, indicó el rescatista.
El efectivo policial indicó que la congeladora no representaba un riesgo, pero no imaginaron que el terreno donde se encontraban realizando el rescate iba a ceder de esa forma. Afortunadamente el fuerte golpe causado por el artefacto no le generó problemas de salud de gravedad y viene recuperándose de forma satisfactoria.
Al margen de las heridas en su rostro y los dolores en la zona cervical, el pronóstico para el suboficial de la policía es positivo.
“Por el momento me encuentro estable, los doctores han sido bien amables, las enfermeras igual, me están ayudando en la recuperación, me han sacado mis placas en la columna, en la cabeza y también me sacaron unas placas en la cara para ver mi dentadura y estoy recuperándome gracias a dios, con la ayuda de los doctores” agregó
Cabe señalar que Jolkeda Loyola mostró todo su entusiasmo para volver a trabajar pronto y tomó el accidente sufrido como gajes del oficio.