El centro de Lima no solo se ha convertido en el escenario de violentos enfrentamientos sino también en el blanco de un grupo de vándalos que ha puesto en peligro tanto el patrimonio cultural como la histórica Plaza San Martín que de lucir llena de turistas, limpia y con los monumentos restaurados pasó a ser un baño público y a estar rodeada de pintas.
Un evidente daño al ornato público que ha obligado al Municipio de Lima a iniciar una intensa jornada de limpieza. Una preocupante realidad y cuantiosas pérdidas económicas que podría revertirse si en la próxima sesión de Consejo Municipal se aprueba declarar el centro de Lima como zona intangible.
De aprobarse y promulgarse dicha ordenanza quedará en manos de la policía y el municipio evitar que se vuelvan a realizar pintas y destrozos del centro histórico de Lima y volver a ser uno de los puntos con mayor atractivo turístico.
