Iris olivos, una madre de familia que acudió a una subasta del SAT para comprar un auto, denunció que pagó más de 6 mil soles por un vehículo supuestamente operativo, pero que estaba en mal estado.
El motor del carro no coincide con la carrocería, y carece de autopartes. Asegura que se siente estafada por una entidad pública que debía brindarle confianza.
En respuesta a esta denuncia, el SAT compartió un comunicado donde afirma que durante el remate se exhibieron diversas fotografías por cada vehículo.
En el caso de la unidad vehicular de placa ARH-163, el precio base fue de 301 soles, adjudicándose a la ciudadana Iris Olivos Cobeñas el haber realizado de manera voluntaria la mejor oferta por el monto de 5700 soles.