Peruanos, venezolanos y colombianos integraban una organización internacional criminal que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres en territorio nacional desde el 2019.
Durante un megaoperativo policial, se allanó 16 inmuebles en el distrito de Lince que funcionaban como lugares de retención y acogida, donde las víctimas eran vigiladas mientras ofrecían sus servicios sexuales en la calle.
Se detuvo a 8 personas, quienes afrontarán investigaciones por los delitos de explotación sexual agravada y trata de personas, crímenes que se sancionan con pena privativa de la libertad no menor de 20 años.
Por su parte, las autoridades no han descartado que se haya rescatado de esta red criminal, incluso a menores de edad.
