La situación de la infraestructura del Congreso no era tan grave como lo dieron a entender algunos congresistas, incluyendo a la propia presidenta del Parlamento, María del Carmen Alva.
El informe de la gerencia de gestión del riesgo de desastres de la Municipalidad de Lima concluye en que el Parlamento no cumple con las condiciones de seguridad en sus edificaciones. Sin embargo, la propia comuna de Lima aclaró que no se trata de una situación crítica que ponga en riesgo a las personas, incluso la información fue confirmada por el Congreso por parte de Víctor Castillo, jefe de ingeniería y mantenimiento del Parlamento, un área netamente técnica.
En las 137 páginas que tiene el informe se hace mención a una serie de observaciones menores como objetos que obstaculizan algunas salidas, falta de barandas, desnivel de las alfombras del hemiciclo, etc, es decir, aspectos que se pueden subsanar con facilidad.
Con dicho sustento, la Mesa Directiva del Congreso continúa prohibiendo el trabajo periodístico en el Hall de los pasos perdidos, argumentando medidas de seguridad.
El área de ingeniería y mantenimiento del Congreso informó que en 15 días se terminará con los trabajos necesarios para subsanar las observaciones del hemiciclo principal.
