Un video se hizo rápidamente viral en redes sociales, por la manera como el dueño de una tienda obligó a una trabajadora de limpieza a cargar con un gran bulto en su tacho de basura, intimidándola y agrediéndola verbalmente.
El hecho sucedió en Lurigancho-Chosica, San Antonio de Carapongo. El iracundo sujeto increpaba a la trabajadora para que se lleve un pesado bulto en su contenedor, en el cual, según los vecinos, solo ponía los restos de tierra que barría y pequeños desperdicios como vasos plásticos, palos de helado, bolsas, entre otros.
Este sujeto recriminaba a la mujer para que se lleve los desperdicios de su tienda, sin embargo, la trabajadora le explicó que ese tipo de basura iba en el camión de basura que pasa casa por casa y se lleva ese tipo de desperdicios, pero este hombre, usando la fuerza, intentó meter a la fuerza su basura.
La trabajadora de limpieza, que es una adulta mayor, tuvo que sacar la basura que el sujeto le obligaba a llevarse de manera prepotente, mientras le gritaba. La mujer, presionada por la actitud violenta del hombre, tuvo que cargar con la pesada bolsa para evitar que la situación pase a mayores.
LA MUJER Y LA POBREZA
La pobreza puede aumentar la violencia. Determinados grupos de mujeres, incluidas las mujeres y niñas que viven en la pobreza, se enfrentan a múltiples formas de discriminación y, como resultado, también sufren un mayor riesgo de violencia. Diversos estudios reflejan que las niñas pobres tienen una probabilidad 2,5 veces mayor de casarse en su infancia que las que pertenecen al quintil más rico.
Las mujeres y niñas que viven en la pobreza son más vulnerables a la explotación sexual, incluida la trata de seres humanos. Por otro lado, aquellas que sufren violencia doméstica o por parte de un compañero sentimental tienen menos opciones de escapar de relaciones violentas, debido a su falta de ingresos y recursos.
Con información de ONU Mujeres.