El distrito de Los Olivos vive inmerso en el mundo de la prostitución. Se trata de trabajadoras sexuales que agreden a mas de un vecino y ahora lanzan piedras a los perros del serenazgo del distrito.
Una mujer con piedra en mano, es capaz de retar a las autoridades del municipio con tal de no dejar de ofrecer sus servicios en plena avenida principal de Los Olivos. Mientras que, otra trabajadora sexual se encuentra dentro de una vivienda tratando de esconderse de los miembros del serenazgo, sin embargo, el dueño de la casa, en pijama, sale a expulsarla de su tranquilo hogar.
Los vecinos denuncian que es un dolor de cabeza de todas las noches, agresiones hacia los fiscalizadores y hasta a los canes del municipio.
Las agresiones que vienen siendo seguidas por el Procuraduria Municipal y la Comisaria de Sol de Oro.