Pese a las restricciones emitidas por el Gobierno Central, que indican que aquellas personas que deseen relajarse frente al mar debían respetar el distanciamiento social y portar la mascarilla, las playas de Huanchaco, en Trujillo, lucieron repletas de visitantes, que en su mayoría no respetaron estas medidas.
El último 25 de diciembre, gran cantidad de niños, adultos y ancianos, prefirieron dejar sus casas ni bien acabó el toque de queda, y desde las 6 de la mañana, coparon todo el balneario trujillano.
Otras de las restricciones que emitió el ejecutivo es el consumo de bebidas alcohólicas y alimentos en las playas. Sin embargo, decenas de personas turistas y trujillanas, desayunaron y almorzaron, durante su visita en el cálido balneario norteño.
