Un joven de 19 años fue entrenado para matar y para aniquilar cualquier obstáculo enemigo de los remanentes de Sendero Luminoso en el VRAEM. El sujeto, identificado como Edgard Torpoco Ortiz, tiene por lo menos dos asesinatos en su haber y poco a poco se van conociendo detalles de cómo llegó a las filas del grupo narcoterrorista.
Desde entonces, Torpoco Ortiz se convirtió en el sicario de Sendero, el ejecutor de los aniquilamientos selectivos que acabaron con la vida de dos colaboradores de la policía y con una lista de posibles víctimas en Lima para ejecutar.
El diario Perú 21 reveló que los ‘Quispe Palomino’ habían encomendado a dos sujetos externos a su organización para realizar reglajes, recoger información sobre unos objetivos en Lima. Dicha información incluye direcciones, ubicaciones y desplazamientos de estos, pero sus identidades todavía son materia de investigación.
El especialista en temas de narcotráfico, Pedro Yaranga, tuvo acceso al testimonio de Edgard Torpoco, quien narró a la Dircote sus inicios, mencionando a Vilma como su primer contacto y puerta de ingreso al grupo senderista.