En un trabajo en conjunto entre el personal de Fiscalización y la Gerencia de Desarrollo Ambiental de la Municipalidad de Bellavista, acompañados de la Policía de Medio Ambiente, acudieron hasta la Urbanización Palomino, donde se ejecutan las obras de la Línea 2 del Metro de Lima, para inspeccionar los posibles daños ambientales y estructurales.
Por su parte, los vecinos de este sector también se hicieron presentes e indicaron que las viviendas están siendo afectadas estructuralmente, además de que no pueden dormir debido a que los trabajos continúan las 24 horas del día.
Pese a ello, señalaron que no se oponen a la construcción de la obra, pero sí piden que sea dentro de los horarios razonables a fin de reducir la contaminación sonora.
Ante esta situación, un equipo de Panamericana Televisión intentó ponerse en contacto con algún representante de la obra, pero no encontró respuesta.